El pasado domingo se llevo a cabo una asamblea en la que se eligió por dos años más, a Andelique como presidente de la Asociación Regional de Productores Agropecuarios del Este (ARPAE).
Junto al reelecto presidente, que afirma estar “muy contento”, se encontrarán dos nuevas personas que se sumarán a la Comisión. Andelique se mostró optimista con la posible aprobación del proyecto para la raparación de caminos rurales.

Caminos rurales
En la sesión de próximo miércoles 22 de diciembre, del Concejo Deliberante, se tratará el proyecto impulsado por ARPAE, sobre los arreglos caminos rurales.
El proyecto inicial cuenta con algunas modificaciones, “pero la esencia está”, asegura Andelique. Lo fundamental del proyecto es que la tasa agraria pasaría a ser cobrada y depositada en una cuenta corriente especial, a la que el Departamento Ejecutivo no va a poder usar.
Según Andelique, ese dinero va a ser usado meramente para el arreglo de los caminos rurales. La Cooperativa Eléctrica será la encargada de los arreglos y se le pagará a partir de una que cada uno de los dueños de los campos, asegure que arreglaron correctamente su camino. Con su firma, cada productor se hará responsable.
Actualmente, la tasa agraria, se encuentra entre el 70% y 80%, aunque la intención de los productores, es que llegue a superar el 90%.
En el partido de Luján, según explicó Andelique, hay 800 kilómetros de caminos rurales. Además, dijo que este momento del año es el ideal para usar las máquinas y arreglar los caminos, ya que las lluvias empeoran y atrasan el trabajo.

El uso de agroquímicos
El proyecto enviado al Concejo Deliberante sobre el uso responsable del glifosato, fue enviado a Comisión, por lo que aún no fue sancionado. “Cuando salió lo del glifosato yo me enoje porque el glifosato es un agroquímico, y es peligroso si se usa mal”, aseguró el presidente de ARPAE.
Existe, según explicó Andelique, una Ley provincial que obliga a usar los agroquímicos de una forma específica, responsable y consiente.
“Si no usamos agroquímicos o herbicidas no podemos hacer nada, dejamos a la buena de Dios, no podemos sembrar soja, maíz, trigo”, aseguran desde ARPAE.
Hoy, afirman que apuntan a la seguridad, que deben tener los operarios en el tratamiento de los herbicidas. Además, agregaron que hace unos años “era mucho más tóxico de lo que es ahora”, hoy los trabajos que se hacen, “son con respeto y conciencia”.

Publicado el jueves 16 de diciembre de 2010