Llegó al gol sin patear al arco
1-0
Arrúa, en contra, le dio la ventaja al local.
Aunque parezca increíble, Luján se puso en ventaja frente a San Miguel sin haber pateado al arco.
Más de media hora de juego había pasado y al conjunto local le costaba generar peligro en el arco rival. Pero luego de varios cabezazos, el defensor Arrúa quiso jugar atrás con su arquero que, confiado, salió lejos a buscar la pelota, que lo sobró por encima de su humanidad y nada puso hacer para evitar el gol.
Así, sin más preámbulos, el Lujanero marcó el primer tanto de lo que terminó siendo la victoria que le permitió cortar la mala racha de cuatro duelos sin ganar.
Publicado el martes 25 de octubre de 2016